Diseñado por el equipo de arquitectos del estudio internacional Zaha Hadid Architects, el Museo Messner Mountain forma parte de una serie de museos localizados en la cima del Monte Kronplatz en honor al alpinista Reinhold Messner.
En honor al reconocido escalador Reinhold Messner y localizado en la cima del pico alpino Monte Kronplatz (Sud Tirol, Italia) encontramos el magnífico Museo Messner Mountain, un espacio único inaugurado en julio del año 2015 con galerías subterráneas y una plataforma en voladizo sobre el increíble valle.
El Messner Mountain Museum, proyecto del estudio de arquitectura Zaha Hadid Architects, es el último de una serie de seis museos construidos para Messner en la cima de la montaña, Reinhold Messner fue el primer escalador en ascender las 14 montañas de más de 8.000 metros de altura y llegar a la cima del Monte Everest sin ayuda extra de oxígeno.
El museo se encuentra ubicado a 2.275 metros sobre el nivel del mar, en el corazón de Kronplatz, una famosa zona por sus increíbles pistas de esquí. En el edificio se exhiben objetos, imágenes y herramientas que cuentan la historia de la vida de Messner como gran alpinista profesional.
Según explica el equipo de arquitectos, la idea del diseño es que los visitantes se sumerjan en esta edificación como si de una caverna y gruta se tratase, antes de emerger al otro lado a través de la pared de la montaña, hacia fuera en la terraza colgante de hasta 6 metros de voladizo que ofrece la posibilidad de admirar las espectaculares vistas panorámicas de los Alpes de Zillertal, los cuales se encuentra en el norte a los Dolomitas y el Sud Tirol.
Tres grandes volúmenes componen el museo, edificaciones que atraviesan la pared rocosa y surgen de la tierra para crear un diseño único. De líneas suavemente curvadas, su fabricación ha sido con fibra de vidrio reforzada con hormigón, para dar la apariencia de fragmentos de roca y hielo, haciendo referencia a la geología de la región. Su exterior permanece en tonos claros mientras que sus interiores se vuelven más oscuros tonos que inspiran el suelo subterráneo de antracita y carbón enterrado.
Los muros de la edificación tienen entre 40 y 50 centímetros de espesor con el fin de mejorar el apoyo de la estructura ejerciendo presión sobre la tierra circundante, mientras que el techo tiene espesores de hasta 70 centímetros. En el interior, las diferentes galerías se organizan en tres plantas conectadas por escaleras simulando cascadas de agua en un arroyo de montaña, según describe la firma.
Un museo que no deja indiferente a nadie, ni a los visitantes amantes de la escalada como a los amantes de la arquitectura y el diseño.
Fotografía, Hufton + Crow
Hola, me parecen muy interesantes los reportajes sobre arquitectura que publican. Como sugerencia le diría que podrían mejorar si pusieran mayor atención a la forma de disponer las imágenes, la elección de las mismas y la resolución. No estaría demás incorporar los planos si cuentan con ellos. Gracias y un saludo.
Gracias. Un saludo