© Blur Arquitectura / © Imágenes Berta BuzunarizLa casa rural “El Cobijo” se ubica en un edificio original del siglo XVI situado en San Vicente, La Rioja. De éste tan sólo se conservaba la fachada principal, que cuenta con protección patrimonial, y un calado de vuelta de mampostería, en perfecto estado de conservación. Los arquitectos diseñaron esta luminosa casa, para alquiler, aprovechando al máximo el espacio disponible y ajustando el presupuesto al milímetro, ya que éste era reducido.
La escalera ligera que ocupa el centro de la vivienda se convierte en el elemento articulador del espacio en todas las plantas. En planta baja separa el comedor-cocina del salón, en planta primera las habitaciones, y en planta segunda la habitación principal de la zona de juegos.
El espacio de la cocina cobra especial importancia, los arquitectos de Blur Arquitectura la diseñaron con la finalidad de destacar la cultura gastronómica y del vino; amplia, parcialmente integrada en el muro, se completa con una isla que se prolonga visualmente con la mesa de comedor de madera de roble.
En el interior se emplearon el mínimo número de materiales, para que de este modo destacasen aún más los paramentos pétreos existentes; madera de roble, hierro barnizado, y el hormigón pulido del pavimento continuo que unifica todas las plantas. El mobiliario interior, compuesto por mesas, mesillas de noche, armarios, lámparas y otros, se diseñó ex profeso para este proyecto.
El calado de vuelta de mampostería era un singular espacio que se utilizaba para conservar el vino, por sus idóneas condiciones de humedad y temperatura. En éste se dispuso una balsa de agua y se iluminó con luz tenue, convirtiéndolo así en el lugar de relax de la casa.
En la fachada posterior se cierra mediante un elemento novedoso que llama la atención, aunque no rompe la armonía del entorno natural en el que se encuentra la vivienda, se trata de una celosía de ladrillo que además de dotar de privacidad a las estancias, controla y tamiza la luz natural que accede al interior. En la planta segunda se abre un marco al paisaje, del que disfrutar desde la zona de juegos.
© Imágenes Berta Buzunariz / Blur Arquitectura: Alex Borrás, Enric Farrerons, Octavio Pérez.
