©ZDES ArchitectsEspacios flexibles y de bajo coste para una vivienda en Estados Unidos. Un proyecto camaleónico del estudio de arquitectura y diseño ZDES Architects.
Con 139 metros cuadrados de superficie esta vivienda localizada en Houston es un ejemplo de vivienda familiar de bajo coste, con capacidad de adaptación a las necesidades del momento. Esta edificación viene nombrada como Shotgun Chameleon, un proyecto diseñado y llevado a cabo por el estudio de diseño y arquitectura estadounidense ZDES Architects.
El equipo de arquitectos se inspiró en las casas sureñas de la costa del Golfo y New Orleans conocidas como Shotgun para el desarrollo de su idea de vivienda camaleónica. Las casas Shotgun son edificios típicamente de una sola planta con habitaciones dispuestas linealmente, la mayoría de ellas siempre han sido subdivididas en habitaciones alquiladas para usos comerciales ya que disponen de puertas laterales que permiten una entrada privada.
Un proyecto en el que se consigue una casa diseñada para que puede ser dividida en una amplia variedad de formas, consiguiendo desde un estudio a una gran vivienda familiar. Un proyecto para satisfacer las necesidades de las familias multigeneracionales o para permitir que diferentes partes de la propiedad sean alquiladas de manera independiente. Siendo el alquiler una opción que ayuda a generar ingresos para compensar el coste de una hipoteca.
La casa dispone de tres dormitorios y dos baños, con exteriores e interiores realizados con paneles de madera contrachapada, revestimiento de madera y una escalera exterior como comunicación interna la cual puede ser cerrada para separar las plantas consiguiendo una vivienda familiar en la planta superior dejando espacio en la planta baja para oficinas u otra pequeña vivienda.
La edificación está diseñada para utilizar la ventilación natural tanto como sea posible, con aberturas para crear un flujo de aire y reducir la necesidad de refrigeración artificial. Incluye electrodomésticos eficientes, como un calentador de agua sin tanque, para reducir aún más los costes energéticos. El uso de materiales sencillos, bajo consumo de energía de refrigeración y la posibilidad de subdivisión de los espacios para posibles usos comerciales consigue un proyectos ambiental y económicamente sostenible.
Flexibilidad y adaptabilidad del espacio interior es clave para este diseño.
Fotografía, Paul Hester
