Ghost Wash House del estudio de arquitectura A-I-R inc.En un terreno de condiciones climáticas extremas en Arizona, el estudio A-I-R, inc., ha construido una vivienda, Ghost Wash House, encerrando una serie de patios y jardines encadenados mediante muros texturados gracias al aparejo del ladrillo.
Cerca de Phoenix, en Camelback Mountain (Paradise Valley, Arizona), el estudio Architecture-Infrastructure-Research, Inc. (A-I-R inc.), fundado en 2001 por el arquitecto Darren Petrucci, ha proyectado la Ghost Wash House como un oasis en el desierto de Sonora.
A partir del análisis de las agrestes condiciones ambientales del lugar donde se ubica la casa, A-I-R inc. utiliza como base de inspiración las torrenteras o cauces de escorrentía del desierto (desert wash), donde se genera, gracias a la captación y conducción del agua de lluvia, su bioma específico.
La casa se implanta en una ladera de suave pendiente en la parte baja de las montañas. El programa de la vivienda se estructura en dos piezas paralelas, orientadas de norte a sur, que acotan patios, terrazas y jardines entre ambos volúmenes.
La pieza situada a este acoge el garaje y las áreas de servicio de la zona de día, cocina y comedor, extendido hacia el exterior gracias a una terraza cubierta. En la pieza ubicada a oeste se desarrolla la zona de noche y sus espacios servidores. La conexión entre ambos volúmenes se realiza mediante una gran sala de estar y encuentros familiares. A causa del desnivel de la parcela, en un nivel inferior se ubican un estudio (vinculado a la zona de día) y un gimnasio (con acceso desde la zona de dormitorios). El programa se completa con una casa independiente para invitados en la parte inferior del terreno, junto a la piscina.
La gran sala de estar es un espacio pasante, completamente acristalado, que se abre al jardín que ocupa el corazón de la intervención, tratado como un oasis en el desierto. La forma abovedada de la cubierta sirve para recoger el agua de lluvia y oculta, con sus grandes vuelos, las placas fotovoltaicas instaladas sobre ella.
La fachada este se cierra evitando el sol de la mañana, mientras que el cerramiento de la fachada oeste se quiebra individualizando estancias y mostrando al exterior la fragmentación interior. De esta manera, se consiguen espacios recogidos y en sombra donde abrir vanos a norte y a sur, garantizando la ventilación cruzada.
La materialidad dominante es la fábrica de ladrillo. Este material cerámico se emplea en muros, cerramientos y pavimentos de los espacios exteriores. Destaca la traba de ladrillo cribado flamenco, donde los tizones o las sogas (dependiendo del caso) sobresalen del paramento, provocando fuertes contrastes de sombras arrojadas, así como los muros con aparejo en diente de sierra.
En los soportes estructurales se utiliza hormigón visto, del mismo modo que en las piezas que enmarcan los accesos y salidas de los espacios principales, tratados como superficies quebradas que conforman pequeñas bancadas. Paneles y listones de madera se emplean para recubrir techos y vuelos.
Los espacios exteriores se engarzan en un recorrido adaptado a la pendiente. El acceso por el lado sur se realiza de manera sinuosa, rodeando un muro curvo, que nos marca la entrada hasta un patio acotado, por donde se accede a la vivienda.
Desde este patio se contempla el resto de la parcela, en suave pendiente hacia el norte y la piscina, en una visual a través de la amplia zona de estar acristalada.
El ajardinamiento exterior emplea especies autóctonas, plantas xerófilas, agaves y cactus, especialmente el saguaro, una cactácea columnar típica del desierto de Sonora.
Fotografías de Bill Timmerman
