Aeropuerto Jewel Changi de Safdie Architects. Jungla de interioresBajo una gran cúpula acristalada encontramos una jungla con una cascada de agua de lluvia que recorre el espacio que compone lo que se ha convertido en el aeropuerto Jewel Changi de Singapur gracias al equipo de arquitectos Safdie Architects.
La firma de arquitectura internacional Safdie Architects es la responsable de la construcción de un inmenso invernadero repleto de vegetación que recorre las cinco plantas en las que podemos encontrar tiendas, espacios públicos e instalaciones aeroportuarias que complementan los servicios del nuevo aeropuerto de Singapur, inaugurado recientemente durante las pasadas semanas.
El edificio de vidrio está conectado a los sistemas de transporte de la ciudad, directamente a la terminal uno del aeropuerto, así como a las terminales dos y tres a través de puentes peatonales.
Un total de cinco plantas por encima del nivel del suelo, y cinco por debajo de este, una edificación de gran altura libre capaz de albergar a la que por el momento se considera la cascada interior más grande del mundo capaz de canalizar 10.000 galones de agua por minuto. Conocida por el nombre de Rain Vortex, tiene una altura total de 40 metros.
En el quinto nivel, encontramos el jardín llamado Canopy Park con una superficie de 14.000 metros cuadrados, un espacio que cuenta con atracciones que incluyen un laberinto de setos y un parque de juegos con redes, así como un área de eventos llamada la Plaza Cloud9, que tiene capacidad para 1.000 personas.
Gracias a la transparencia de la estructura del complejo aeroportuario, la luz penetra en todas partes, mientras que el techo se drena a través de la cúpula para crear una espectacular cascada, dejando caer siete pisos al nivel más bajo del edificio. El conjunto de la cúpula inversa toroidal del proyecto, junto con el jardín interior que la rodea, crea un nuevo tipo de experiencia espacial en el que la espera de un vuelo puede convertirse en un gran momento para los viajeros que visitan la terminal.
Catorce columnas en forma de árbol y una viga anular soportan el techo abovedado, que está formado por una cubierta a modo de rejilla continua y soporta paneles de vidrio de alto rendimiento. Un vidrio que ha sido diseñado para maximizar la luz que llega al edificio mientras evita que se caliente demasiado el interior garantizando así que las plantas tengan las condiciones ideales para crecer.
Cada panel de vidrio tiene un espacio de 16 milímetros para absorber el ruido del despegue y el aterrizaje de los aviones, y además ha sido probado exhaustivamente para asegurarse de no cause ningún reflejo de distracción para los controladores de tránsito aéreo.
Además, gracias a un diseño basado en la autosuficiencia y la sostenibilidad, durante las tormentas de lluvia, el agua se recolecta para alimentar la cascada interior así como para regar los jardines del edificio.
Según explica el líder de la firma Safdie Architects, en respuesta al cambio climático que estamos sufriendo, el mundo de la arquitectura actual necesita ser más versátil y flexible de manera que los nuevos proyectos puedan responder a entornos más extremos. De esta manera es como Safdie Architects basa tanto este increíble proyecto como su porfolio pasado y futuro.
Fotografías, cortesía del Aeropuerto Jewel Changi.
